Antetokounmpo lleva al Olimpo a los Bucks

   



    Los Bucks llevaban un par de años entrando en todas las quinielas para ganar la NBA, pero siempre terminaban fracasando y lo que es peor, dando la sensación de que nunca llegarían. Llegaron los rumores en el mercado de fichajes de si Anteto cambiaría de franquicia. Yo reconozco que no veía a los Bucks ganando una final, porque jugar en una franquicia no ganadora siempre es más difícil. Pero el griego ha decidido que este año quería demostrar que ahora mismo, es la estrella absoluta de la NBA.

    No lo han tenido nada fácil Milwaukee, recordemos que las finales empezaron con un parcial 2-0, para Phoenix, con números y sensaciones portentosas de Booker, Paul y Ayton. En lo personal, lamento que Chris Paul no haya ganado el anillo, ha hecho una temporada memorable. Booker es un jugador impresionante, a sus veinticuatro años ha promediado 28,1 puntos por partido en la final y unas nada despreciables 4 asistencias por partido. Veremos si la gasolina le dura a Paul, para luchar la próxima temporada por el anillo.

    Con todo este panorama, remontar el parcial inicial se antojaba imposible. Pero los Bucks se pusieron el mono de trabajo y el bloque, defendió más duro que nunca. El último partido de las finales por parte de Anteto, ha sido memorable. Se hablará de sus cincuenta puntos, pero en mi opinión, lo más importante ha sido el nivel altísimo que ha tenido en defensa. Catorce rebotes y tapones hasta la saciedad, demostrando que ha dominado la pintura, evitando que Booker sacara a pasear su tiro de dos en suspensión y dejándolo en 19 puntos en la final. Antetokounmpo ha contado con Middleton y Holiday como escuderos. Cabe destacar el tiro exterior de Holiday (39% de efectividad en la presente temporada), Middleton (41% en tiros de 3) y López (34% de efectividad en tiros de 3) durante toda la temporada. Los Bucks han sido un bloque, sin demasiado aspavientos, pero tremendamente efectivos.

    La fotografía de la final se la lleva el jugador griego, que con un promedio de 35,2 puntos por partido y 13,2 rebotes, ha marcado el territorio como una fiera inexpugnable. Un premio doble, si se me permite la opinión, porque como jugador "no americano" parece tener que hacer doble merito para ser reconocido. Ahora sólo falta saber si este título será algo anecdótico o Giannis marcará una época en la NBA, como también lo fueron Jordan, Bryant o James ¡Qué el show no pare!

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