La liga, capítulo 1: Celta de Vigo. El trabajo como clavo al que agarrarse.

     El Celta comienza esta temporada con un proyecto de continuidad. Oscar García sufrió mucho al final de la pasada temporada y quería reforzar al equipo con cinco o seis jugadores. La llegada del técnico vino a poner punto y final, a una serie de proyectos muy alejados de lo que ha sido históricamente la filosofía del equipo celeste. 

    El equipo tiene mucho a lo que agarrarse y aunque la pasada temporada sufrió, sigo pensando que una plantilla con: Nolito, Aspas, Hugo Mallo o Santi Mina tiene mucha mordiente. Este año contará con la colaboración del recién aterrizado desde Granada, Vadillo. Jugador que en otro tiempo quisieron muchos grandes de Europa, Mourinho entre otros, y del que siempre estamos esperando que estalle y demuestre algo de lo que se le veía antes de su catastrófica lesión.

    El problema del Celta, en mi opinión, está en que no tiene un buen director en la media que le ordene el fútbol, lo que obligó el año pasado a Aspas a tener que bajar demasiado a la media para generar algo. Tapia ha venido para convertirse en ese timón, pero habrá que ver como es su adaptación a la liga española. Estaremos pendientes de la evolución del joven Fran Beltrán, que a pesar de su edad ya acumula dos temporadas en la primera división.

    Un equipo armado con muchos jugadores nacionales y con una marcada vocación atacante. Espero que recupere su mejor nivel, siempre ha sido gratificante ver jugar a este equipo, cuando ha estado en forma. Si me preguntan que se puede esperar del Celta, creo que no debería pasar problemas para salvarse pero que depende demasiado del estado de Aspas. Si el "mago" tiene un buen año, veremos al Celta por encima del décimo puesto, pero tendría dificultades para entrar en competiciones europeas. Si Aspas no encuentra su camino al gol y su mejor juego el celta sufrirá, pero el equipo tiene talento para no descender.