La Supercopa más hermosa

Real Madrid y FC Barcelona nos regalaron ayer un partido de ida y vuelta, en el que la tónica general fue el dominio del Barcelona y los contraataques del Real Madrid. Ganó el Madrid y sufrió al final del partido, pero sufrió porque no fue la noche de Higuain o más bien fue la noche de Victor Valdés, el portero catalán estuvo soberbio.

La claves del partido pasaron por el gran cierre que hicieron sobre Messi, Ramos, Pepe, Kedhira y Xabi Alonso, con ayudas continuas de Di Maria o Higuain. Messi no estuvo, pero a pesar de eso hizo un golazo de falta desde bastante lejos. Vuelve a demostrar que si le das un segundo, te mata.

En cuanto al Madrid, su delantera de cuatro, fue un vendaval para el Barcelona. La linea de cuatro de atrás del Barcelona sufrió demasiado sin Puyol. Pique no estuvo en la primera parte y Mascherano estuvo irreconocible y francamente mal. Y mientras Ronaldo, Özil, Di Maria e Higuain galopaban una y otra vez para golpear al Barcelona, flanqueados por una presión descomunal de Pepe que abarcaba tanto la zaga como el medio. De haber tenido la noche Higuain pudo haber metido tres o cuatro goles y el resultado habría sido un escándalo.

Las conclusiones son las de siempre, el Barça se siente cómodo con la pelota y el Madrid sin ella y con espacios. Así que no veo claros favoritos en futuros duelos, pero si queda claro que vuelven a ser, lamentablemente para la liga, los únicos candidatos. El Valencia se ha reforzado muy bien, pero sus jugadores tienen que dar un paso al frente si quieren algo más.