El tigre se come al león



El Atlético de Madrid se proclamó campeón de la Europa League ante el Athletic Club, en un partido en el que fue muy superior al equipo bilbaino. La final fue decidida principalmente por el Tigre Falcao, que fue el hombre de la final.



El partido a priori contaba con una igualdad que no se vio en el terreno de juego. De hecho, el Athletic que se vio ayer dista muchísimo de lo que ha sido durante toda la temporada. No le estoy quitando mérito al Atletico, todo lo contrario, el equipo madrileño desactivó por completo el medio del campo de los leones y dejó a sus jugadores como náufragos en patera rodeados por tiburones. Salió mucho más metido en la final el equipo de Simeone.

La presión atlética, fundamentada principalmente sobre Amorebieta y los problemas que este tenía para sacar el balón de manera clara, provocaron pronto robos en zonas muy peligrosas. Y así en el minuto 7 de partido, Falcao se sacaba de la chistera un golazo que pesó como una losa sobre los leones. Pesó demasiado, el equipo no terminó de reaccionar y da la sensación de que la final les vino grande. Aunque bien es cierto que, si el arbitro no se hubiera tragado un claro penalti de Godín a Llorente, la final hubiera sido bien distinta.

El caso de Godín es increíble. Siempre hace penaltis, en todos los partidos. No comprendo como un central con su experiencia cometa semejantes errores. Y no es el primero. Ya hizo un penalti sobre Higuaín de infantil, que sirvió definitivamente el partido al equipo merengue. Y ayer hizo otra más que apuntar a la lista. Y una más en el currículum de Stark, no entiendo que le den una final.

La segunda parte trajo un partido en el que el Athletic dominó y dominó, pero los nervios al parecer no les dejaron pensar con claridad. El Atleti espero, y soltaba contras terriblemente peligrosas. Y en una de esas, Diego se salió haciendo un jugadón, en el que se iba de tres jugadores y marcaba cruzando a la izquierda de Iraizoz. Fin del partido, e impresionaba ver a Llorente, Muniaín y Toquero. Felicidades a toda la parroquia atlética.



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